jueves, 26 de abril de 2007

Los glaciares se desplazan el doble de rápido que en 1990

Medio AmbientePedro Pozas Terrados
Que la Antártida se derrite no es nuevo. Sin embargo, el ritmo creciente que ha experimentado el deshielo en los últimos 15 años, ha desbordado todas las previsiones. La placa de hielo de la zona occidental del continente -400 metros más profunda de lo que se creía- está perdiendo grosor a una velocidad de vértigo, y todo indica que se debe al mayor desplazamiento de los glaciares que, a una media de 1,2 metros por año -el doble de rápido que en 1990-, fluyen hacia el remoto mar de Amundsen, de acuerdo con una investigación estadounidense y chilena publicada en la revista «Science».De hecho, se ha demostrado que el mayor del grupo, el Glaciar de la Isla de los Pinos, ha acelerado en un 3,5 por ciento su desplazamiento entre abril de 2001 y comienzos de 2003, que en total supone un aumento del 25 por ciento desde los años 70. Estas conclusiones se conocieron dos días después de que la NASA confirmara que esos deshielos alteran el clima con efectos que podrían ser desastrosos en muchas regiones del planeta, al tiempo que elevan el nivel de los mares en más de 0,2 milímetros por año, cantidad que se acerca a la descarga que se había calculado para toda la Antártida y Groenlandia, pues de estos glaciares, fluye al mar un 60 por ciento más de hielo del que se puede acumular nuevamente por la caída de nieve. «No se trata necesariamente de un colapso de la plataforma de hielo de la Antártida Occidental, pero sí podría conducir a ello», asevera el glaciólogo de la Universidad estatal de Pensilvania, Richard Alley.Pero no sólo hacia el mar de Amundsen fluyen los glaciares. Desde que en 2002 se fracturara la plataforma de hielo Larsen B en la Península Antártica, se ha registrado un desplazamiento ocho veces más rápido que el habitual hacia al mar de Wedell, provocando una disminución de hasta 38 metros de altura en los glaciares en sólo seis meses, según constatan estudios del Laboratorio de Propulsión a Chorro, el Centro Goddard de Vuelos Espaciales y el Centro Nacional para Estudios de la Nieve y el Hielo. «Estas investigaciones demuestran por primera vez la relación entre el colapso de las plataformas de hielo y el calentamiento global, así como el desplazamiento acelerado de los glaciares», subraya la NASA.Deshielo alarmante en ChinaMientras, en China, donde se encuentran la mitad de los glaciares de Asia y el 15 por ciento de los de todo el mundo, la masa de hielo de éstos disminuyó un siete por ciento en las últimas cuatro décadas y se redujo un 5,5 por ciento su extensión, según informan científicos de la Academia de Ciencias de China en Pekín, que estiman que en 2050 podrían haberse derretido el 64 por ciento de los glaciares de China y, de no moderarse la actual «velocidad alarmante» de derretimiento, en 2100 podrían haber desaparecido todos. Cerca de un cuarto de la población habita al oeste del país y, aunque a corto plazo el deshielo se traducirá en mayor disponibilidad de agua, a largo plazo provocará la formación de un desierto en la región.En lo que respecta a Europa, las perspectivas tampoco son alentadoras. Los glaciares de Suiza se derritieron en 2002 y 2003 a una velocidad nunca antes vista y el cálido verano de 2003 hizo que las masas de hielo se resintieran. En promedio, la lengua del glaciar retrocedió 22,9 metros, el valor más alto desde 1959.

No hay comentarios: